PAUTAS PARA LA MONOGRAFÍA (válido para libres como para los que promocionan)
El trabajo científico:Los trabajos científicos se caracterizan por dar a conocer, de un modo claro y preciso en lo posible, determinados conocimientos.
Todo escrito científico es, de alguna manera, una exposición ordenada de un trabajo previo de investigación. Decimos de alguna manera porque, en muchos casos, no se trata solamente de un informe sobre resultados: hay una reelaboración de conocimientos ya existentes, obtenidos o no por el autor, que se organizan con fines expositivos específicos. Existe un esfuerzo de investigación previo, aunque éste no se manifieste más que a través de la organización y sistematización de resultados ya conocidos. Si esto no fuese así, si no existiese ningún tipo de investigación –documental o de campo- no podríamos hablar en propiedad de un trabajo científico. Estaríamos en cambio frente a un ensayo, un artículo de opinión, un resumen o cualquier otro de los variados géneros literarios existentes.
Pero, para que podamos hablar en propiedad de un trabajo científico, es preciso que éste posea algunas características de forma que lo adecuen a las exigencias metodológicas necesarias para garantizar su seriedad. Entre las mismas podemos enumerar el uso de un lenguaje apropiado, un orden expositivo coherente y sistemático, un aparato crítico que otorgue las necesarias referencias a la obra. Además de lo anterior habrá que tener en cuenta también otros requisitos formales, no ya de tipo general sino específicamente exigidos por la institución que eventualmente haya encargado el trabajo o ante la cual este será presentado.
Dentro de la denominación genérica de “trabajos científicos” existe una variedad bastante grande de posibilidades, que surgen de necesidades y circunstancias específicas. Los lectores seguramente habrán oído hablar de monografías y tesis, de ponencias, papers, y artículos científicos, de tesinas, trabajos de ascenso e informes de investigación . Cada uno de esos nombres se refiere a un tipo particular de trabajo.
De todos los trabajos científicos enumerados nos centraremos en la monografía.
La monografía es un trabajo de investigación bibliográfica sobre un tema determinado; no consiste en una acumulación de datos sino que, por el contrario, se caracteriza por una selección apropiada de la bibliografía sobre ese tema, un análisis exhaustivo de ese material bibliografíco y la elaboración de conclusiones personales que surgen como consecuencia del análisis.
Para hacer una monografía, primero hay que elegir un tema específico; luego, recopilar información documentada sobre ese tema, ordenarla y calsificarla; analizarla y –finalmente- arribar a algunas conclusiones acerca de todo el material que se ha trabajado.
La elección del tema:
Para elegir un tema hay que tener varios factores en cuenta, como por ejemplo: que sea de interés personal, atractivo; que se adecue a las expectativas del docente que ha solicitado el trabajo (es decir, que se vincule con la asignatura y el programa del docente que la pidió); que no sea demasieado complicado buscar información sobre ese tema (libros propios, de la biblioteca de la Facultad y otras bibliotecas cercanas, Internet, etc.) y, finalmente, que el tipo de investigación que el tema demande sea acorde con el nivel que cada uno haya desarrollado en su formación.
Otro de los elementos que hay que considerar para elegir un tema es que no sea tan general que impida su correcto tratamiento en unas 10 o 15 páginas; ni tan específico que resulte imposible no agotarlo en apenas 3 páginas.
El tiempo para hacer una monografía:
El tiempo que lleva hacer una monografía es relativo, y depende –entre otras cosas- de las fechas de entrega que proponga el profesor. Si la monografía es breve, de entre 10 y 15 páginas, se debe considerar al menos un mes a partir de la selección del tema. Otro de los temas a considerar es el tiempo que demanda la búsqueda bibliogáfica (discusión respecto de los textos que hay que consultar, localización de los mismos, lectura, análisis, etc.).
Y, finalmente, el tiempo que llevará la redacción de una versión preliminar y del texto definitivo. Se está, entonces, ante un proyecto a mediano plazo que requiere entusiasmo, compromiso, responsabilidad y mucho trabajo para que los resultados sean los mejores.
Entonces, una vez selecciondo el tema, hay que realizar un plan realista junto al docente.
La selección del material bibliográfico:
En primer lugar, hay que tener en cuenta que el material bibliográfico con el que se trabajará debe ser accesible, es decir que se deberán descartar aquellos textos que sean de difícil consulta por su ubicación geográfica o por su nivel de complejidad.
Una vez encontrada una cantidad suficiente –y razonable- de material, se procederá a su lectura y registro, para lo cual se sugiere la elaboración de fichas bibliográficas (una para cada libro).
De la lectura atenta de estas fichas surgirá la bibliografía definitiva. Otro lugar de investigación, es Internet. Allí, a través de los llamados “buscadores” se puede obtener información variada pero hay que ser precavido, ya que en la red abunda la información plagiada o superficial.
Es importante ser criterioso en el momento de decidir qué material se va a utilizar de la biblioteca. Esto significa no dejarse llevar por todo lo que se consiga, sino hacer una lectura rápida del material e ir descartando aquello que, en principio, no es fudamental para el trabajo. En la lectura de los textos, es importante aplicar las técnicas de estudio, principalmente la del subrayado.
La estructura de la monografía:
Por tratarse de un trabajo científico, la monografía debe respetar una estructura rigurosa, organizada en tres grandes secciones: la introducción, el desarrollo y las conclusiones.
La introducción: aquí se plantea el problema que se va a trabajar. Se hace una referencia a la elección del tema (los motivos de esa elección, etc.) y se menciona lo que puede aportar la investigación. También se delimita o circunscribe el tema, es decir, se expone qué aspecto específico del tema propuesto se va a tratar y desde qué punto de vista. Además pueden plantearse los objetivos del trabajo, es decir, las metas que se buscan alcanzar. En esta sección se presenta la hipótesis, un planteo que sirve como guía de trabajo. De su desarrollo, que constituye la segunda sección del trabajo, se extraerán las conclusiones que demuestren su validez.
El desarrollo: es el cuerpo principal de la monografía. Aquí se pone de manifiesto la tarea de selección y análisis del material con que se ha trabajado, así como también la elaboració personal a partir de las distintas fuentes consultadas. Esta sección se caracteriza por la novedad –las ideas desarrolladas deben ser originales-, el discurso argumentativo que le sirve al autor para demostrar la hipótesis planteada en la introducción; el planteo de nuevas ideas que aporten nuevos elementos a lo ya conocido. El desarrollo puede estar a su vez dividido en parágrafos, de acuerdo con el tratamiento del tema general.
La conclusión: es el lugar en que se incluyen las inferencias del investigador y se expone claramente el resultado obtenido, que confirma la hipótesis inicial. Debe desprenderse natural y lógicamente de lo expuesto en el desarrollo y estar correctamente fundamentada en la lectura bibliográfica y en el análisis de las fuentes.
Por dónde empezar?
Aunque parezca apresurado, es de mucha utilidad comenzar escribiendo el índice y la introducción de la monografía junto con el título.
En el caso del título, puede reflejar directamente el tema por tratar, o ser más amplio e incluir el tema como subtítulo. Por ejemplo:
Título: Estudios Culturales Latinoamericanos.
Subtítulo: La propuesta de Néstor García Canclini : Cómo leer la realidad cultural latinoamericana.
La organización lógica del trabajo debe reflejarse en el índice, por eso es útil colocarlo al comenzar el trabajo.
Ejemplo:
Introducción..........................................................................................2
LOS ESTUDIOS CULTURALES LATINOAMERICANOS...............4
Antecedentes........................................................................6
Especificidades del objeto de estudio...................................8
Transculturación, Hibridez, Heterogeneidad.......................12
La transdisciplinariedad como mirada.................................15
Recepción y resignificación.................................................17
LA PROPUESTA TEÓRICA DE NESTOR GARCIA CANCLINI.....21
2.2 Hibridez de la realidad latinoamericana. ...............................23
Géneros Híbridos.................................................................25
La historieta: Inodoro Pereira, mixtura genérica..................27
CONCLUSIONES.................................................................................30
BIBLIOGRAFIA.....................................................................................33
Las citas y las notas a pie de página.
A través de las citas, se legitiman las informaciones de la monografía que pertenecen a otros autores; asimismo, la cita ejemplifica lo que el autor de la monografía quiere mostrar.
Se sugiere, como regla general, que los fragmentos citados no superen la media carilla de extensión. Cuando se cita, se asume que el autor de la monografía comparte la idea del autor citado, a menos que el fragmento que antecede o precede la cita contenga expresiones críticas.
El texto reproducido debe escribirse entre comillas. Al final, una llamada remite a la nota correspondiente al pie de página, donde se consigna el nombre del autor y la obra de la que fue extraído el fragmento, como en el siguiente ejemplo:
Como afirma Ford, “El miedo al “otro” inmigrante también se ha extendido a América Latina, como en varios textos lo ha descrito Eduardo Galeano, y a sectores sociales como el campo intelectual”
Y, a pie de página:
1Ford, Aníbal. Resto del mundo. Nuevas mediaciones de las agendas críticas internacionales. Buenos Aires, Norma, 2005, P. 28.
En casos como el del ejemplo, en que la cita no supera los tres renglones, puede incluirse en el párrafo correspondiente, pero si su longitud es mayor se recomienda presentarla así:
Es por todo lo dicho anteriormente que conviene tener en cuenta las relaciones con el OTRO en la cultura latinoamericana. Porque, como lo afirma Aníbal Ford:
El macartismo tiene tiempos largos y ahora está refloreciendo con fuerza.
Uno de sus ejes está en en la “critica” a las universidades norteamericanas,
fundamentalmente a los departamentos de ciencias sociales y humanidades
(algo que conocemos bien en América Latina). Una prueba de esto es el
artículo que acaba de escribir Linda Bowles, mujer del secretario de justicia
de Bush, en la revista para hispanoparlantes Contacto
Al pie de página aparecerá la siguiente referencia:
2 Op. Cit., p. 28
Las citas tienen que ser fieles, no puede modificarse ninguna parte. Si se suprimiera una palabra o frase, la omisión se indicará con puntos suspensivos entre paréntesis o corchetes. Por ejemplo:
El macartismo tiene tiempos largos y ahora está refloreciendo con
fuerza. (...) Una prueba de esto es el artículo que acaba de escribir
Linda Bowles, mujer del secretario de justicia de Bush, en la revista
Para hispanoparlante Contactos.
Algunas abreviaturas o expresiones comunes:
AAVV: autores varios
Anón: anónimo.
Cf., Cfr.: “confero”: confróntese, compárese.
E.g.: “ exempli gratia”, por ejemplo.
Ib., Ibid. O ibidem: en el mismo lugar (en la misma obra y en la misma página).
i.e.: “id est”, esto es, es decir.
Op. Cit.: obra ya citada del mismo autor.
P., Pag.: Página, plural: pags. o pp.
P. ej., p.e.: por ejemplo.
Seud.: Seudónimo.
Sic: así (significa que una cita es textual, y se usa cuando es posible que el lector suponga que se ha cometido un error en la transcripción, o cuando la afirmación referida resulta sorprendente).
N. del A: nota del autor.
N.del E: nota del editor.
N. del T: nota del traductor.
Las citas de bibliografía:
Los trabjos cadémicos suelen ajustarse a normas convencionales de presentación, que garantizan la lectura sin dificultades por parte de los destinatarios, a la vez que denotan conocimento de la formalidad de la situación por parte de quienes los realizan.
Uno de los aspectos en que se hace mayor hisncapié es la referencia bibliográfica, que constituye la fuente de la que se ha partido para llevar a cabo el trabajo.
Las siguientes son algunas pautas útiles par consignar una fuente:
Referencia de libros
Apellido y nombre completo del autor (o autores). Título y subtítulo de la obra (en itálica o subrayado). Lugar de edición. Editorial. Año de edición. Número de página y, si corresponde, del tomo o volumen
Por ejemplo. Greimas, Algirdas Julien. La semiótica del texto: ejercicios prácticos. Barcelona, Paidós, 1993.
Cita de artículos de revistas:
Apellido y nombre del autor.título del artículo (entre comillas).nombre de la revista (en itálica o subrayado).volumen y número del ejemplar, mes y año, páginas en que aparece el artículo
por ejemplo: Pla, Roger. “Los orígenes (1536-1880)”. Capítulo, la historia de la literatura argenina. N.° 2 agosto de 1967, pp.1-18.
Cita de capítulos de libros, ensayos, obras colectivas, actas de congresos, etc.
Apellido y nombre del autor. Título del capítulo o ensayo (entre comillas). En: si corresponde, nombre de quien está a cargo de la edición de la obra o AAVV (autores varios) título de la obra colectiva (en itálica o subrayado)
Por ejemplo: Todorov, Tzvetán. “El origen de los géneros”. En: AAVV. Teorías de los géneros literarios. Madrid. Arco/Libros, 1981.
El estilo de la monografía:
Es conveniente evitar la primera persona del singular. En su lugar, puede usarse la primera persona del plural (que incluye al lector) o bien la forma impersonal. Por ejemlo, es preferible “Revelaremos a continuación...”, “Se revelará a continuación...”, que “Revelaré a continuación...”
Es preferible utilizar oraciones cortas y evitar el uso excesivo de pronombres y proposiciones incluidas. También se recomienda utilizar punto aparte cada vez que se va a cambiar de idea, o que se va a tratar un aspecto diferente de una misma idea.
Hay que definir todos los términos técnicos o teóricos que se incluyan, aunque quien vaya a leer la monografía sea un lector especializado. Por ejemplo: “La estrategia narrativa de García Márquez, entendiendo por estrategia...”
Es conveniente incluir una breve biografía del autor que se va a trabajar, puesto que muchas veces quien lee no está al tanto de fechas o acontecimientos de la vida y el contexto del autor, que pueden ser de mucha utilidad para la comprensión.
Escribir supone un entrenamiento. Esto implica que habrá que volver a leer permanentemente lo que se escribe y tachar, corregir, etc.,hasta llegar a la versión definitiva. Una vez concluido el trabajo se debe volver a leerlo para verificar que las páginas están numeradas correlativamente, que las referencias son correctas y que las notas al pie se corresponden con las llamadas; se debe revisar la ortografía y la puntuación y comprobar si la bibliografía está completa, adecuada a las normas y en orden alfabético.
La presentación del trabajo:
entregar el trabajo en la fecha y forma requeridas
presentarlo en una carpeta, con una carátula que contenga los siguientes datos: nombre y a pellido del autor, tema y título elegidos, fecha, institución, cátedra y profesor a cargo.
Bibliografía:
Alvarado, Maite. Paratexto. Buenos Aires, Oficina de Publicación del CBC, Universidad de Buenos Aires, 1994.
Ciapuscio, Guiomar. Tipos textuales. Buenos Aires, Oficina de Publicaciones del CBC, Universidad de Buenos Aires, 1994.
Eco, Umberto. Cómo se hace una tesis. Madrid, Gedisa, 1983.
Fernández, Stella Maris. Técnicas del trabajo intelectual. Facultad de Filosofía y Letras, Buenos Aires, 1992.
Manzo, Abelardo. Manual para la preparación de monografías. Buenos Aires, Humanitas, 1986.
Marro, Mabel S. Y Amalia B. Dellamea. Producción de textos. Estrategias del escritor y recursos del idioma. Buenos Aires, Docencia, Fundación Hernandarias, 1993.
Sabino, Carlos A. Cómo hacer una tesis. Buenos Aires, Humanitas, 1996.
Standop, Ewald. Cómo preparar monografías e informes. Buenos Aires, Kapelúsz, 1976.
Van Dijk, Teun. La ciencia del texto. Buenos Aires, Paidós, 1978.
Texto y contexto. Madrid, Cátedra, 1980.
Zamudio, Bertha y Ana Atorresi. El texto explicativo (su aplicación y enseñanza). Buenos Aires, Conicet
El trabajo científico:Los trabajos científicos se caracterizan por dar a conocer, de un modo claro y preciso en lo posible, determinados conocimientos.
Todo escrito científico es, de alguna manera, una exposición ordenada de un trabajo previo de investigación. Decimos de alguna manera porque, en muchos casos, no se trata solamente de un informe sobre resultados: hay una reelaboración de conocimientos ya existentes, obtenidos o no por el autor, que se organizan con fines expositivos específicos. Existe un esfuerzo de investigación previo, aunque éste no se manifieste más que a través de la organización y sistematización de resultados ya conocidos. Si esto no fuese así, si no existiese ningún tipo de investigación –documental o de campo- no podríamos hablar en propiedad de un trabajo científico. Estaríamos en cambio frente a un ensayo, un artículo de opinión, un resumen o cualquier otro de los variados géneros literarios existentes.
Pero, para que podamos hablar en propiedad de un trabajo científico, es preciso que éste posea algunas características de forma que lo adecuen a las exigencias metodológicas necesarias para garantizar su seriedad. Entre las mismas podemos enumerar el uso de un lenguaje apropiado, un orden expositivo coherente y sistemático, un aparato crítico que otorgue las necesarias referencias a la obra. Además de lo anterior habrá que tener en cuenta también otros requisitos formales, no ya de tipo general sino específicamente exigidos por la institución que eventualmente haya encargado el trabajo o ante la cual este será presentado.
Dentro de la denominación genérica de “trabajos científicos” existe una variedad bastante grande de posibilidades, que surgen de necesidades y circunstancias específicas. Los lectores seguramente habrán oído hablar de monografías y tesis, de ponencias, papers, y artículos científicos, de tesinas, trabajos de ascenso e informes de investigación . Cada uno de esos nombres se refiere a un tipo particular de trabajo.
De todos los trabajos científicos enumerados nos centraremos en la monografía.
La monografía es un trabajo de investigación bibliográfica sobre un tema determinado; no consiste en una acumulación de datos sino que, por el contrario, se caracteriza por una selección apropiada de la bibliografía sobre ese tema, un análisis exhaustivo de ese material bibliografíco y la elaboración de conclusiones personales que surgen como consecuencia del análisis.
Para hacer una monografía, primero hay que elegir un tema específico; luego, recopilar información documentada sobre ese tema, ordenarla y calsificarla; analizarla y –finalmente- arribar a algunas conclusiones acerca de todo el material que se ha trabajado.
La elección del tema:
Para elegir un tema hay que tener varios factores en cuenta, como por ejemplo: que sea de interés personal, atractivo; que se adecue a las expectativas del docente que ha solicitado el trabajo (es decir, que se vincule con la asignatura y el programa del docente que la pidió); que no sea demasieado complicado buscar información sobre ese tema (libros propios, de la biblioteca de la Facultad y otras bibliotecas cercanas, Internet, etc.) y, finalmente, que el tipo de investigación que el tema demande sea acorde con el nivel que cada uno haya desarrollado en su formación.
Otro de los elementos que hay que considerar para elegir un tema es que no sea tan general que impida su correcto tratamiento en unas 10 o 15 páginas; ni tan específico que resulte imposible no agotarlo en apenas 3 páginas.
El tiempo para hacer una monografía:
El tiempo que lleva hacer una monografía es relativo, y depende –entre otras cosas- de las fechas de entrega que proponga el profesor. Si la monografía es breve, de entre 10 y 15 páginas, se debe considerar al menos un mes a partir de la selección del tema. Otro de los temas a considerar es el tiempo que demanda la búsqueda bibliogáfica (discusión respecto de los textos que hay que consultar, localización de los mismos, lectura, análisis, etc.).
Y, finalmente, el tiempo que llevará la redacción de una versión preliminar y del texto definitivo. Se está, entonces, ante un proyecto a mediano plazo que requiere entusiasmo, compromiso, responsabilidad y mucho trabajo para que los resultados sean los mejores.
Entonces, una vez selecciondo el tema, hay que realizar un plan realista junto al docente.
La selección del material bibliográfico:
En primer lugar, hay que tener en cuenta que el material bibliográfico con el que se trabajará debe ser accesible, es decir que se deberán descartar aquellos textos que sean de difícil consulta por su ubicación geográfica o por su nivel de complejidad.
Una vez encontrada una cantidad suficiente –y razonable- de material, se procederá a su lectura y registro, para lo cual se sugiere la elaboración de fichas bibliográficas (una para cada libro).
De la lectura atenta de estas fichas surgirá la bibliografía definitiva. Otro lugar de investigación, es Internet. Allí, a través de los llamados “buscadores” se puede obtener información variada pero hay que ser precavido, ya que en la red abunda la información plagiada o superficial.
Es importante ser criterioso en el momento de decidir qué material se va a utilizar de la biblioteca. Esto significa no dejarse llevar por todo lo que se consiga, sino hacer una lectura rápida del material e ir descartando aquello que, en principio, no es fudamental para el trabajo. En la lectura de los textos, es importante aplicar las técnicas de estudio, principalmente la del subrayado.
La estructura de la monografía:
Por tratarse de un trabajo científico, la monografía debe respetar una estructura rigurosa, organizada en tres grandes secciones: la introducción, el desarrollo y las conclusiones.
La introducción: aquí se plantea el problema que se va a trabajar. Se hace una referencia a la elección del tema (los motivos de esa elección, etc.) y se menciona lo que puede aportar la investigación. También se delimita o circunscribe el tema, es decir, se expone qué aspecto específico del tema propuesto se va a tratar y desde qué punto de vista. Además pueden plantearse los objetivos del trabajo, es decir, las metas que se buscan alcanzar. En esta sección se presenta la hipótesis, un planteo que sirve como guía de trabajo. De su desarrollo, que constituye la segunda sección del trabajo, se extraerán las conclusiones que demuestren su validez.
El desarrollo: es el cuerpo principal de la monografía. Aquí se pone de manifiesto la tarea de selección y análisis del material con que se ha trabajado, así como también la elaboració personal a partir de las distintas fuentes consultadas. Esta sección se caracteriza por la novedad –las ideas desarrolladas deben ser originales-, el discurso argumentativo que le sirve al autor para demostrar la hipótesis planteada en la introducción; el planteo de nuevas ideas que aporten nuevos elementos a lo ya conocido. El desarrollo puede estar a su vez dividido en parágrafos, de acuerdo con el tratamiento del tema general.
La conclusión: es el lugar en que se incluyen las inferencias del investigador y se expone claramente el resultado obtenido, que confirma la hipótesis inicial. Debe desprenderse natural y lógicamente de lo expuesto en el desarrollo y estar correctamente fundamentada en la lectura bibliográfica y en el análisis de las fuentes.
Por dónde empezar?
Aunque parezca apresurado, es de mucha utilidad comenzar escribiendo el índice y la introducción de la monografía junto con el título.
En el caso del título, puede reflejar directamente el tema por tratar, o ser más amplio e incluir el tema como subtítulo. Por ejemplo:
Título: Estudios Culturales Latinoamericanos.
Subtítulo: La propuesta de Néstor García Canclini : Cómo leer la realidad cultural latinoamericana.
La organización lógica del trabajo debe reflejarse en el índice, por eso es útil colocarlo al comenzar el trabajo.
Ejemplo:
Introducción..........................................................................................2
LOS ESTUDIOS CULTURALES LATINOAMERICANOS...............4
Antecedentes........................................................................6
Especificidades del objeto de estudio...................................8
Transculturación, Hibridez, Heterogeneidad.......................12
La transdisciplinariedad como mirada.................................15
Recepción y resignificación.................................................17
LA PROPUESTA TEÓRICA DE NESTOR GARCIA CANCLINI.....21
2.2 Hibridez de la realidad latinoamericana. ...............................23
Géneros Híbridos.................................................................25
La historieta: Inodoro Pereira, mixtura genérica..................27
CONCLUSIONES.................................................................................30
BIBLIOGRAFIA.....................................................................................33
Las citas y las notas a pie de página.
A través de las citas, se legitiman las informaciones de la monografía que pertenecen a otros autores; asimismo, la cita ejemplifica lo que el autor de la monografía quiere mostrar.
Se sugiere, como regla general, que los fragmentos citados no superen la media carilla de extensión. Cuando se cita, se asume que el autor de la monografía comparte la idea del autor citado, a menos que el fragmento que antecede o precede la cita contenga expresiones críticas.
El texto reproducido debe escribirse entre comillas. Al final, una llamada remite a la nota correspondiente al pie de página, donde se consigna el nombre del autor y la obra de la que fue extraído el fragmento, como en el siguiente ejemplo:
Como afirma Ford, “El miedo al “otro” inmigrante también se ha extendido a América Latina, como en varios textos lo ha descrito Eduardo Galeano, y a sectores sociales como el campo intelectual”
Y, a pie de página:
1Ford, Aníbal. Resto del mundo. Nuevas mediaciones de las agendas críticas internacionales. Buenos Aires, Norma, 2005, P. 28.
En casos como el del ejemplo, en que la cita no supera los tres renglones, puede incluirse en el párrafo correspondiente, pero si su longitud es mayor se recomienda presentarla así:
Es por todo lo dicho anteriormente que conviene tener en cuenta las relaciones con el OTRO en la cultura latinoamericana. Porque, como lo afirma Aníbal Ford:
El macartismo tiene tiempos largos y ahora está refloreciendo con fuerza.
Uno de sus ejes está en en la “critica” a las universidades norteamericanas,
fundamentalmente a los departamentos de ciencias sociales y humanidades
(algo que conocemos bien en América Latina). Una prueba de esto es el
artículo que acaba de escribir Linda Bowles, mujer del secretario de justicia
de Bush, en la revista para hispanoparlantes Contacto
Al pie de página aparecerá la siguiente referencia:
2 Op. Cit., p. 28
Las citas tienen que ser fieles, no puede modificarse ninguna parte. Si se suprimiera una palabra o frase, la omisión se indicará con puntos suspensivos entre paréntesis o corchetes. Por ejemplo:
El macartismo tiene tiempos largos y ahora está refloreciendo con
fuerza. (...) Una prueba de esto es el artículo que acaba de escribir
Linda Bowles, mujer del secretario de justicia de Bush, en la revista
Para hispanoparlante Contactos.
Algunas abreviaturas o expresiones comunes:
AAVV: autores varios
Anón: anónimo.
Cf., Cfr.: “confero”: confróntese, compárese.
E.g.: “ exempli gratia”, por ejemplo.
Ib., Ibid. O ibidem: en el mismo lugar (en la misma obra y en la misma página).
i.e.: “id est”, esto es, es decir.
Op. Cit.: obra ya citada del mismo autor.
P., Pag.: Página, plural: pags. o pp.
P. ej., p.e.: por ejemplo.
Seud.: Seudónimo.
Sic: así (significa que una cita es textual, y se usa cuando es posible que el lector suponga que se ha cometido un error en la transcripción, o cuando la afirmación referida resulta sorprendente).
N. del A: nota del autor.
N.del E: nota del editor.
N. del T: nota del traductor.
Las citas de bibliografía:
Los trabjos cadémicos suelen ajustarse a normas convencionales de presentación, que garantizan la lectura sin dificultades por parte de los destinatarios, a la vez que denotan conocimento de la formalidad de la situación por parte de quienes los realizan.
Uno de los aspectos en que se hace mayor hisncapié es la referencia bibliográfica, que constituye la fuente de la que se ha partido para llevar a cabo el trabajo.
Las siguientes son algunas pautas útiles par consignar una fuente:
Referencia de libros
Apellido y nombre completo del autor (o autores). Título y subtítulo de la obra (en itálica o subrayado). Lugar de edición. Editorial. Año de edición. Número de página y, si corresponde, del tomo o volumen
Por ejemplo. Greimas, Algirdas Julien. La semiótica del texto: ejercicios prácticos. Barcelona, Paidós, 1993.
Cita de artículos de revistas:
Apellido y nombre del autor.título del artículo (entre comillas).nombre de la revista (en itálica o subrayado).volumen y número del ejemplar, mes y año, páginas en que aparece el artículo
por ejemplo: Pla, Roger. “Los orígenes (1536-1880)”. Capítulo, la historia de la literatura argenina. N.° 2 agosto de 1967, pp.1-18.
Cita de capítulos de libros, ensayos, obras colectivas, actas de congresos, etc.
Apellido y nombre del autor. Título del capítulo o ensayo (entre comillas). En: si corresponde, nombre de quien está a cargo de la edición de la obra o AAVV (autores varios) título de la obra colectiva (en itálica o subrayado)
Por ejemplo: Todorov, Tzvetán. “El origen de los géneros”. En: AAVV. Teorías de los géneros literarios. Madrid. Arco/Libros, 1981.
El estilo de la monografía:
Es conveniente evitar la primera persona del singular. En su lugar, puede usarse la primera persona del plural (que incluye al lector) o bien la forma impersonal. Por ejemlo, es preferible “Revelaremos a continuación...”, “Se revelará a continuación...”, que “Revelaré a continuación...”
Es preferible utilizar oraciones cortas y evitar el uso excesivo de pronombres y proposiciones incluidas. También se recomienda utilizar punto aparte cada vez que se va a cambiar de idea, o que se va a tratar un aspecto diferente de una misma idea.
Hay que definir todos los términos técnicos o teóricos que se incluyan, aunque quien vaya a leer la monografía sea un lector especializado. Por ejemplo: “La estrategia narrativa de García Márquez, entendiendo por estrategia...”
Es conveniente incluir una breve biografía del autor que se va a trabajar, puesto que muchas veces quien lee no está al tanto de fechas o acontecimientos de la vida y el contexto del autor, que pueden ser de mucha utilidad para la comprensión.
Escribir supone un entrenamiento. Esto implica que habrá que volver a leer permanentemente lo que se escribe y tachar, corregir, etc.,hasta llegar a la versión definitiva. Una vez concluido el trabajo se debe volver a leerlo para verificar que las páginas están numeradas correlativamente, que las referencias son correctas y que las notas al pie se corresponden con las llamadas; se debe revisar la ortografía y la puntuación y comprobar si la bibliografía está completa, adecuada a las normas y en orden alfabético.
La presentación del trabajo:
entregar el trabajo en la fecha y forma requeridas
presentarlo en una carpeta, con una carátula que contenga los siguientes datos: nombre y a pellido del autor, tema y título elegidos, fecha, institución, cátedra y profesor a cargo.
Bibliografía:
Alvarado, Maite. Paratexto. Buenos Aires, Oficina de Publicación del CBC, Universidad de Buenos Aires, 1994.
Ciapuscio, Guiomar. Tipos textuales. Buenos Aires, Oficina de Publicaciones del CBC, Universidad de Buenos Aires, 1994.
Eco, Umberto. Cómo se hace una tesis. Madrid, Gedisa, 1983.
Fernández, Stella Maris. Técnicas del trabajo intelectual. Facultad de Filosofía y Letras, Buenos Aires, 1992.
Manzo, Abelardo. Manual para la preparación de monografías. Buenos Aires, Humanitas, 1986.
Marro, Mabel S. Y Amalia B. Dellamea. Producción de textos. Estrategias del escritor y recursos del idioma. Buenos Aires, Docencia, Fundación Hernandarias, 1993.
Sabino, Carlos A. Cómo hacer una tesis. Buenos Aires, Humanitas, 1996.
Standop, Ewald. Cómo preparar monografías e informes. Buenos Aires, Kapelúsz, 1976.
Van Dijk, Teun. La ciencia del texto. Buenos Aires, Paidós, 1978.
Texto y contexto. Madrid, Cátedra, 1980.
Zamudio, Bertha y Ana Atorresi. El texto explicativo (su aplicación y enseñanza). Buenos Aires, Conicet